¿Te cansas más últimamente? ¿Te distraes con mayor facilidad? ¿Has empezado a tener problemas de memoria o dificultad para planificar tareas? Éstas y otras señales podrían ser síntomas de Long COVID-19 o Síndrome de COVID Persistente. En este post te contamos cómo afecta la COVID-19 al cerebro y qué puedes hacer al respecto.
Si estás leyendo este artículo, probablemente hayas pasado la enfermedad, con o sin síntomas, una o varias veces. A pesar de que la mayoría de personas se recupera por completo, algunas arrastran o comienzan a experimentar síntomas tras haberse recuperado.
En este artículo hablamos sobre el conocido SARS-CoV-2 y cómo los cambios orgánicos que desencadena en el cerebro pueden estar relacionados con problemas que alteran el funcionamiento cognitivo.
Según la OMS, entre el 10% y el 20% de los/as pacientes experimenta diversos efectos a medio y largo plazo después de pasar la enfermedad inicial. Esta amalgama de síntomas, que varían de persona a persona, se conoce como Long COVID o Síndrome de COVID Persistente e incluye, entre otros:
- Fatiga
- Dificultad respiratoria
- Problemas de memoria, concentración, embotamiento cognitivo
- Tos persistente
- Dolor torácico
- Dificultad para hablar
- Dolores musculares
- Pérdida del olfato o del gusto
- Problemas gastrointestinales
- Depresión o ansiedad
- Fiebre
7 datos relevantes sobre el Síndrome de COVID Persistente o Long COVID
1. Se caracteriza por la persistencia de síntomas de COVID-19 semanas o meses después de la afectación inicial o por la reaparición de síntomas tras un tiempo sin ellos.
2. Su aparición no está relacionada con la gravedad de la infección inicial. Puede darse tanto en pacientes que requirieron hospitalización, como en personas que apenas tuvieron síntomas.
3. Diferentes variantes del SARS-CoV-2 pueden causar diferentes tipos de SCP. La variante Ómicrom se relaciona con cuadros más leves.
4. Se asemeja a la encefalitis miálgica (síndrome de fatiga crónica).
5. Las personas vacunadas desarrollan estos cuadros con menor frecuencia y menor intensidad.
6. Afecta más a mujeres que a hombres, como ocurre con la fatiga postviral a causa de otras enfermedades. La causa no está clara, pero podría relacionarse con la diferencia hormonal y de liberación de ciertas enzimas entre hombres y mujeres.
7. Junto a la fatiga y a la dificultad respiratoria, los síntomas neurológicos son los más frecuentemente reportados.
COVID-19 , Cómo afecta al cerebro
Se sabe que el SARS-CoV-2 penetra en la mucosa olfativa atravesando la barrera hematoencefálica. Al llegar a diferentes tejidos del sistema nervioso daña células endoteliales provocando inflamación, trombos y otras alteraciones.
Se ha comparado el cerebro de pacientes COVID con el de sujetos control sin la enfermedad para detectar cambios que no serían visibles a simple vista. Los investigadores encontraron que, en comparación con los controles, los participantes que tenían COVID-19 mostraron:
- Una mayor pérdida de materia gris en la corteza orbitofrontal lateral
- Un aumento en los signos de daño tisular en varias regiones del cerebro, incluso en el centro del olfato del cerebro (el núcleo olfativo y el tubérculo)
- Más signos de atrofia cerebral generalizada
- Mayor deterioro cognitivo en varias pruebas de función cognitiva
Los investigadores explican que sus hallazgos sugieren que estos cambios cerebrales están estrechamente relacionados con la infección por SARS-CoV-2. No se sabe si estos cambios son permanentes, aclaran los investigadores, enfatizando la capacidad que tiene el cerebro de recuperarse.
¿Cómo ataca el SARS-CoV-2 al cerebro?
Aún no se conoce el mecanisco de acción, pero se hipotetiza con un conjunto de factores relacionados entre sí que podría ser la causa de estas alteraciones.
En un estudio sobre neuropatología del virus en el cerebro de primates no humanos, la doctora Tracy Fischer y su equipo han arrojado resultados de una neuropatología que es consistente con la observada en pacientes humanos mostrada anteriormente.
La hipótesis que manejan es que esta muerte neuronal ocurre debido a la reducción de oxígeno y los problemas en la interacción de gases con los pulmones a causa de inflamación en distintas aéreas sumado a los problemas circulatorios derivados de ésta.
La neuroinflamación, las microhemorragias y la hipoxia cerebral fue encontrada en los primates infectados con SARSCOV-2, incluso en aquellos que no habían desarrollado una enfermedad respiratoria grave.
Este fenómeno podría estar relacionado con la aparición de síntomas neurológicos en personas que, sin haber padecido gravemente la enfermedad inicial acaban desarrollando el síndrome de COVID Persistente.
«Niebla mental» AKA procesos neuropsicológicos comprometidos
Después de la recuperación de los síntomas típicos de COVID-19, como fiebre, tos o dificultad para respirar, se hace más evidente la conocida niebla mental persistente, que no es otra cosa que una alteración de las funciones ejecutivas y procesos atencionales y de memoria.
«Las quejas típicas de esta niebla son pérdida de memoria, dificultad para encontrar palabras, problemas de atención y abrumarse por tareas simples. Muchos de estos pacientes no han tenido ningún accidente cerebrovascular o infección del cerebro, ni han sufrido convulsiones ni nada que fuera neurológicamente evidenciado durante su infección por COVID-19, sin embargo están presentando una alteración en su cognición.»
Explica el neurólogo Alexander E. Merkler en esta entrevista a la revista Health Matters.
¿Se pueden evaluar de manera precisa y objetiva estas alteraciones?
Desde las actividades que requieren de cierta complejidad intelectual, como preparar exámenes, hasta las tareas más básicas de la vida cotidiana, como vestirse o cocinar, todas requieren del manejo de habilidades atencionales, control de impulsos, procesamiento de estímulos, planificación, etc.
Si has detectado algún problema en estas áreas en ti o en algún familiar cercano, te sugerimos que consultes a un profesional.
Ya sean esas alteraciones consecuencia de la Covid-19, problemas normales «de la edad», síntomas derivados de otros problemas psicológicos como estrés, ansiedad o depresión, existen pruebas de evaluación neuropsicológica que arrojan resultados claros y en pocos minutos.
En Nesplora contamos con una red de profesionales de la psicología y neuropsicología cerca de ti, que evalúan con las herramientas más avanzadas para diseñar el tratamiento adaptado a cada paciente.
La evaluación con realidad virtual, es respecto a otras pruebas tradicionales, la manera más precisa y objetiva de medir los procesos tal y como ocurren en la vida real. Además su tecnología genera informes detallados con datos objetivos, gráficas y explicaciones que facilitan su comprensión.
Si quieres saber más sobre la evaluación con realidad virtual, lee este artículo y 👉 descarga esta guía
En próximas entradas hablaremos sobre COVID-19 y sus efectos en atención, memoria y funciones ejecutivas, respectivamente.
¿Quieres enterarte cuando se publiquen?